El Canalla ganó por 2-1 en el debut de Madelón y cortó una racha de 20
años sin victorias en la Bombonera. La visita abrió la cuenta con un gol
de De León (PT 43m), empató Gaitán (ST 15m) y Caraglio (ST 40m) decretó
el triunfo. Fue expulsado Riquelme.
Boca cayó como local ante Rosario Central por 2-1. El Xeneize profundizó
un poco más sus problemas y el Canalla, con el debut de Leonardo
Madelón en la dirección técnica, sumó tres puntos clave en su lucha por
salir de la zona de Promoción (superó a Racing en unidades, pero no en el
promedio).
En el primer
tiempo, el
equipo que dirige Abel Alves tuvo el control de la pelota y careció de
ideas para inquietar a Hernán Galíndez. No contó con ninguna llegada al
arco y sólo preocupó con centros aislados en la búsqueda de un cabezazo
salvador de Martín Palermo.
Los rosarinos se mostraron ordenados, no sufrieron sobresaltos y
apostaron a la contra. Antes de abrir el marcador, generó tres chances
claras: Mario Paglialunga sacó un
remate que salió cerca y más tarde
exigió a Javier García, mientras que Jonathan Gómez hizo lucir al arquero.
A los 43 minutos, y de un tiro de esquina desde la izquierda, llegó
el gol de Rosario Central. Un
nuevo desconcierto defensivo de
Boca en el juego aéreo le permitió a Guillermo Burdisso cabecear y
Adrián De León, casi sobre la línea, se vio beneficiado con un rebote en
su cuerpo que terminó en la red.
En el complemento las cosas no cambiaron. El técnico local metió a
Cristian Chávez por Luiz Alberto pero mantuvo la línea de cuatro
defensores con el retroceso de Gary Medel, quien luego se retiró con una
lesión en la rodilla derecha (ingresó Cristian Erbes, como lateral
derecho).
En una ráfaga en la que el Xeneize pareció despertarse llegó el
empate. El
reloj marcaba 15 minutos cuando
Juan Román Riquelme hizo una buena pared con el Pochi y, luego del
rebote del arquero ante el remate del enganche, apareció Nicolás Gaitán
para empujarla.
El gol fue un envión anínico para los de Alves, que pudieron haber dado
vuelta el resultado. Sin embargo, una nueva distracción defensiva y un
horror de García en la salida le permitieron a la visita llevarse la
victoria de la Bombonera a los 40 y con un cabezazo de Milton Caraglio.
El tanto había llegado de una falta inexistente que Rafael Furchi
le cobró a Chávez. Las protestas de Riquelme, quien había tenido un
primer tiempo con imprecisiones y una segunda mitad un poco más
correcta, llevaron al árbitro a amonestarlo y luego mostrarle la
tarjeta roja.
Ya no quedaba tiempo: ni los remates desde afuera de Jesús Méndez, flojo
en la marca y auspicioso con sus disparos desde lejos, ni un cabezazo
de Palermo fueron suficientes para cambiar la historia. El delantero
tuvo poca participación y sigue sin poder hacer el gol 219.
La caída fue un nuevo golpe para Boca, ahora anteúltimo en las
posiciones, y Alves, quien parece estar cada vez más perdido en su
cargo. El triunfo de Rosario Central cortó con una racha de 20 años sin
victorias en la Bombonera y encendió la ilusión para mantener la
categoría.
años sin victorias en la Bombonera. La visita abrió la cuenta con un gol
de De León (PT 43m), empató Gaitán (ST 15m) y Caraglio (ST 40m) decretó
el triunfo. Fue expulsado Riquelme.
Boca cayó como local ante Rosario Central por 2-1. El Xeneize profundizó
un poco más sus problemas y el Canalla, con el debut de Leonardo
Madelón en la dirección técnica, sumó tres puntos clave en su lucha por
salir de la zona de Promoción (superó a Racing en unidades, pero no en el
promedio).
En el primer
tiempo, el
equipo que dirige Abel Alves tuvo el control de la pelota y careció de
ideas para inquietar a Hernán Galíndez. No contó con ninguna llegada al
arco y sólo preocupó con centros aislados en la búsqueda de un cabezazo
salvador de Martín Palermo.
Los rosarinos se mostraron ordenados, no sufrieron sobresaltos y
apostaron a la contra. Antes de abrir el marcador, generó tres chances
claras: Mario Paglialunga sacó un
remate que salió cerca y más tarde
exigió a Javier García, mientras que Jonathan Gómez hizo lucir al arquero.
A los 43 minutos, y de un tiro de esquina desde la izquierda, llegó
el gol de Rosario Central. Un
nuevo desconcierto defensivo de
Boca en el juego aéreo le permitió a Guillermo Burdisso cabecear y
Adrián De León, casi sobre la línea, se vio beneficiado con un rebote en
su cuerpo que terminó en la red.
En el complemento las cosas no cambiaron. El técnico local metió a
Cristian Chávez por Luiz Alberto pero mantuvo la línea de cuatro
defensores con el retroceso de Gary Medel, quien luego se retiró con una
lesión en la rodilla derecha (ingresó Cristian Erbes, como lateral
derecho).
En una ráfaga en la que el Xeneize pareció despertarse llegó el
empate. El
reloj marcaba 15 minutos cuando
Juan Román Riquelme hizo una buena pared con el Pochi y, luego del
rebote del arquero ante el remate del enganche, apareció Nicolás Gaitán
para empujarla.
El gol fue un envión anínico para los de Alves, que pudieron haber dado
vuelta el resultado. Sin embargo, una nueva distracción defensiva y un
horror de García en la salida le permitieron a la visita llevarse la
victoria de la Bombonera a los 40 y con un cabezazo de Milton Caraglio.
El tanto había llegado de una falta inexistente que Rafael Furchi
le cobró a Chávez. Las protestas de Riquelme, quien había tenido un
primer tiempo con imprecisiones y una segunda mitad un poco más
correcta, llevaron al árbitro a amonestarlo y luego mostrarle la
tarjeta roja.
Ya no quedaba tiempo: ni los remates desde afuera de Jesús Méndez, flojo
en la marca y auspicioso con sus disparos desde lejos, ni un cabezazo
de Palermo fueron suficientes para cambiar la historia. El delantero
tuvo poca participación y sigue sin poder hacer el gol 219.
La caída fue un nuevo golpe para Boca, ahora anteúltimo en las
posiciones, y Alves, quien parece estar cada vez más perdido en su
cargo. El triunfo de Rosario Central cortó con una racha de 20 años sin
victorias en la Bombonera y encendió la ilusión para mantener la
categoría.