Granuloma acral
por lamido
El Comportamiento estereotipado en los perros
En ocasiones has sido testigo de cómo tu animal de compañía comete acciones
imprevisibles y difíciles de interpretar. Hechos como dar vueltas
persiguiendo su propio rabo, lamerse las patas de forma compulsiva o
babear de un modo excesivo responden a una tipología de comportamiento
extraño, pero no por ello desconocido: el comportamiento estereotipado en
perros. Se trata de actos constantes sin objetivo preciso con el fin de
aliviar el estrés o la ansiedad.
Lo importante es detectar el problema, buscar soluciones e intentar
ayudar a tu mascota en la medida de lo posible. Tenemos que tener en cuenta que
se trata de un problema alejado del razonamiento y, todos los datos que
obtengamos servirán para entender mejor a tu can. Lo que más suele preocupar más
es la dificultad del animal para acatar las órdenes que le das, sobre todo si
por lo general tienes un perro obediente que en un momento dado se encuentra
descontrolado y guiado por impulsos. Si no te hace caso, consulta con tu
veterinario que te indique las medidas más apropiadas,
¿De dónde proviene el comportamiento estereotipado en los perros ?
Son muchos los que opinan sobre la naturaleza del comportamiento estereotipado
en perros, pero son mayoría los que coinciden en la dificultad de definirlo. Se
barajan muchos conceptos y teorías extraídas del
comportamiento animal y, para no caer en error o equivocación, se recomienda
que estudies tú mismo dónde y cómo vive tu perro y de qué forma le influye el
entorno.
El perro es el mejor amigo del hombre y repite lo que ve o lo que siente
que agrada a su dueño una y otra vez. Esto a simple vista no parece peligroso,
pero puede llegar a convertirse. Por ejemplo, si ves que tu mascota corre detrás
de su cola sin sentido, seguro te haga gracia, te rías y le rasques la cabeza
como felicitándola por el show. Corres el riesgo que piense que está bien lo que
ha hecho y, sólo por este motivo, puedes tenerla repitiendo la misma acción
todos los días cada vez que te vea. Las caricias no siempre son la mejor
respuesta y quizá produzcan futuros problemas difíciles de manejar.
Cuando el animal comete estos actos, son tan obsesivos e ilógicos que ni
siquiera le producen alegría o placer. Él no sabe por qué está teniendo esa
determinada conducta, y lo más grave es que quizá no pueda parar. Muchas veces
el problema proviene de un cambio de casa o de individuos nuevos en el hogar.
El can querrá llamar la atención y se meterá en un ciclo vicioso del que
más tarde le costará salir.
Comportamiento compulsivo frente a estereotipado en perros
No es lo mismo decir que tu
perro actúa
de forma compulsiva que explicar que lo hace de forma muy compulsiva. La gran
diferencia subyace ahí, en la intensidad de la acción y en la repercusión
que ésta le origina. Por eso, cuando veas que tu mascota repite algo de un modo
incontrolado, fíjate en el orden de repeticiones o tandas, como si de una
cuestión matemática se tratase.
En nosotros, las acciones neuróticas tienen un único origen, el mental,
mientras que en animales existen otros factores, como los exteriores. Afectan en
gran medida al comportamiento canino y consiguen modificar las costumbres de tu
can hasta tal punto de que, si intentas evitarlo radicalmente y sin ayuda
cualificada, conseguirás un mordisco en forma de protesta. Piensa que en ese
momento son enfermos sin conciencia.
A veces, esta conducta deriva en acciones autodestructivas, como el
morderse una pata hasta hacerse sangre o pegarse contra una pared hasta la
extenuación. Estos síntomas demuestran la inestabilidad mental de tu mascota
en estado puro. Tampoco en todos los casos se llega a estos extremos, pero
podemos ver otras acciones menos destructivas pero igual de problemáticas:
tensión sexual acumulada, fobia a objetos insignificantes que antes ni se
percibían, ansia por morder en todo momento, etc. Esta pérdida de control
debería estar vigilada.
Tratamiento adecuado para el comportamiento estereotipado en los perros
Hay que proceder con rapidez para que tu perro no se haga daño. Tienes
que estar pendiente de él ante cualquier cambio de actitud, tanto dentro como
fuera del inmueble. En cuanto observes algo anormal, acude al veterinario
inmediatamente. El especialista en salud animal decidirá si se trata de
anécdotas sin trascendencia o de hechos contraproducentes.
Puede ser que el error esté en nosotros: nuestro ritmo ajetreado de vida
y los horarios imposibles a los que nos vemos sometidos hacen que tu mascota
no se sienta cerca de ti. Jugar con ella ofrecerla los cuidados necesarios
diarios son tareas que te agradecerá. Es posible que el veterinario te prescriba
una medicación para controlar los comportamientos estereotipados. Los
cambios ambientales positivos colaborarán en su mejoría, pero éstos estarán
marcados por el experto. Recuerda que debes ser paciente y contribuir a crear un
vínculo agradable entre tu perro, tú y el espacio que estáis compartiendo.
Fuente: www.facilisimo.com