El poltegeist de David Linch
Todo comenzó tras cambiarse de casa. La casa nueva estaba cerca de la
ciudad de Manchester, pero esta era más grande que la anterior y estaba
en un entorno muy tranquilo. Por ello los padres de David la eligieron.
La verdad es que no era ni extraña ni tétrica, era bastante acogedora.
Pero en Octubre de 198la familia Licnh empezó a notar que algo ocurría
en esa casa: aparecían en sitios extraños o se desplazaban solos.
La primera vez que notaron lo extraño de los sucesos fue a raíz de la
pistola que el padre guardaba para protegerse de los ladrones.
Éste la guardaba en un cajón de su habitación, bajo la ropa doblada
para que sus hijos no la vieran. Una mañana la pistola apareció encima
de la mesita de la habitación. Él sorprendido la guardó otra vez no sin
antes preguntar a su hijo David si la había cogido para jugar. Este
negó. Durante varias semanas consecutivas la pistola aparecía fuera del
cajón sin que el hijo se hiciera responsable de ello. El padre se fiaba
de su hijo, además, tenía pruebas que él no era. Pero alguién debía
tocar la pistola...Así que llamó a la la Policía que, a su vez, le
envió a la Sociedad de investigaciones Psíquicas de Cambridge.
Allí le sugirieron que tal vez un poltegeist fuese la causa de que los
objetos se moviesen. Además, habían comprobado que los objetos que se
movían estaban relacionados de algún modo con su hijo. Así que le
aconsejaron que separara al niño de la casa para comprobar si el
fenómeno ocurría sin él. Nada pasó durante la semana que David pasó en
casa de unos parientes. Pero en cuanto regresó, los fenomenos volvieron
con él. Así que decidieron llevar al niño a un internado. Durante su
ausencia todo se normalizó pero al volver por vacaciones de Navidad, el
poltegeist regresó, y en esta ocasión, más fuerte: experimentaron
desplazamientos incluso los muebles más pesados.
Parece que al ente no le gustó que se llevaran al chico pues durante
esas navidades todo se precipitó: David escuchaba ruidos de arañazos
detrás de la pared de su dormitorio y pisadas frente a su ventana. La
pero noche fue cuando los arañazos parecieron provenir en dirección del
armario de su habitación y, al encender la luz, comprobó que el armario
se había desplazado por lo menos 20 cm desde la pared, en dirección
hacia él. Intentó levantarse de la cama pero, casi de manera
simultánea, la cama comenzó a moverse con violencia. David estaba
aterrado, se había quedado helado y palido, pero en cuanto pudo
reaccionar salió corriendo de la habitación y pasó el resto de la noche
en el cuarto de sus padres. Durante lo que quedaba de noche no se
produjeron más incidentes.
A partir de esa noche todo en esa casa se convirtió en un calvario: los
muebles se movían, los adornos comenzaban a volar por ahí...había
charcos por el suelo de toda la casa y por las paredes aparecieron
fantasmales mensajes garrapateados con una escritura infantil. La
inscripción más intrigante decía: "Ten cuidado, David." La familía no
resistió más y se mudaron tras vender la casa.
Todo se normalizó para ellos en la casa nueva...ni un fenómeno extraño,
ninguna voz...¿De la antigua casa? Lo último que supieron de ella fue
por un artículo de la prensa. Decía: "Niño fallece durante la noche al
caerle un armario encima mientras dormía. Se investigan los hechos"
Todo comenzó tras cambiarse de casa. La casa nueva estaba cerca de la
ciudad de Manchester, pero esta era más grande que la anterior y estaba
en un entorno muy tranquilo. Por ello los padres de David la eligieron.
La verdad es que no era ni extraña ni tétrica, era bastante acogedora.
Pero en Octubre de 198la familia Licnh empezó a notar que algo ocurría
en esa casa: aparecían en sitios extraños o se desplazaban solos.
La primera vez que notaron lo extraño de los sucesos fue a raíz de la
pistola que el padre guardaba para protegerse de los ladrones.
Éste la guardaba en un cajón de su habitación, bajo la ropa doblada
para que sus hijos no la vieran. Una mañana la pistola apareció encima
de la mesita de la habitación. Él sorprendido la guardó otra vez no sin
antes preguntar a su hijo David si la había cogido para jugar. Este
negó. Durante varias semanas consecutivas la pistola aparecía fuera del
cajón sin que el hijo se hiciera responsable de ello. El padre se fiaba
de su hijo, además, tenía pruebas que él no era. Pero alguién debía
tocar la pistola...Así que llamó a la la Policía que, a su vez, le
envió a la Sociedad de investigaciones Psíquicas de Cambridge.
Allí le sugirieron que tal vez un poltegeist fuese la causa de que los
objetos se moviesen. Además, habían comprobado que los objetos que se
movían estaban relacionados de algún modo con su hijo. Así que le
aconsejaron que separara al niño de la casa para comprobar si el
fenómeno ocurría sin él. Nada pasó durante la semana que David pasó en
casa de unos parientes. Pero en cuanto regresó, los fenomenos volvieron
con él. Así que decidieron llevar al niño a un internado. Durante su
ausencia todo se normalizó pero al volver por vacaciones de Navidad, el
poltegeist regresó, y en esta ocasión, más fuerte: experimentaron
desplazamientos incluso los muebles más pesados.
Parece que al ente no le gustó que se llevaran al chico pues durante
esas navidades todo se precipitó: David escuchaba ruidos de arañazos
detrás de la pared de su dormitorio y pisadas frente a su ventana. La
pero noche fue cuando los arañazos parecieron provenir en dirección del
armario de su habitación y, al encender la luz, comprobó que el armario
se había desplazado por lo menos 20 cm desde la pared, en dirección
hacia él. Intentó levantarse de la cama pero, casi de manera
simultánea, la cama comenzó a moverse con violencia. David estaba
aterrado, se había quedado helado y palido, pero en cuanto pudo
reaccionar salió corriendo de la habitación y pasó el resto de la noche
en el cuarto de sus padres. Durante lo que quedaba de noche no se
produjeron más incidentes.
A partir de esa noche todo en esa casa se convirtió en un calvario: los
muebles se movían, los adornos comenzaban a volar por ahí...había
charcos por el suelo de toda la casa y por las paredes aparecieron
fantasmales mensajes garrapateados con una escritura infantil. La
inscripción más intrigante decía: "Ten cuidado, David." La familía no
resistió más y se mudaron tras vender la casa.
Todo se normalizó para ellos en la casa nueva...ni un fenómeno extraño,
ninguna voz...¿De la antigua casa? Lo último que supieron de ella fue
por un artículo de la prensa. Decía: "Niño fallece durante la noche al
caerle un armario encima mientras dormía. Se investigan los hechos"