Los tucumanos y la Academia jugaron 22 minutos bajo un diluvio, en los
que Jorge De Olivera se convirtió en héroe al atajarle un penal a Luis
Rodríguez (PT 16m). Luego, Gabriel Favale se vio obligado a suspender el
encuentro.
Un empate 0-0 inconcluso con ganadores y perdedores en un mix de
emociones tuvo lugar este viernes en los escasos 22 minutos que se
pudieron jugar en Tucumán del encuentro entre Atlético y Racing. Ganó La Academia con un
penal atajado que lo salvó de tener que remar
desde abajo y el
Decano la chance de atesorar una ventaja que alimentaba su esperanza de
mantener la categoría.
Y, cuando la lluvia terminó de encharcar el campo de juego y de
convencer a Gabriel Favale de que no se podía seguir, perdieron los
hinchas, sobre todo los de Racing que habían viajado a seguir a su
equipo.
El juego había arrancado conuna chance clara para la visita, cuando
Gabriel Hauche recibió por derecha y definió afuera. Pero después, a
medida que el agua iba cobrando protagonismo e impidiendo un desarrollo
normal, las cosas se emparejaron de la mano de las imprecisiones.
Hasta que a los 16 Favale cobró un agarrrón en un centro a Juan
Azconzábal en el área y Luis Rodríguez se dispuso a ajusticiar a Jorge
De Olivera. Pero el
arquero se agrandó arrojándose a
su derecha y con las piernas despejó el tiro que ilusionaba a los de
Mario Gómez. Y las cosas seguían como al principio.
Poco después, a los 22, la historia conocida. La cortina de lluvia y la
suspensión acertada para estirar la definición a una jornada futura.
Mientras tanto, Atlético sigue sin ganar y Racing fuera de Promoción.
que Jorge De Olivera se convirtió en héroe al atajarle un penal a Luis
Rodríguez (PT 16m). Luego, Gabriel Favale se vio obligado a suspender el
encuentro.
Un empate 0-0 inconcluso con ganadores y perdedores en un mix de
emociones tuvo lugar este viernes en los escasos 22 minutos que se
pudieron jugar en Tucumán del encuentro entre Atlético y Racing. Ganó La Academia con un
penal atajado que lo salvó de tener que remar
desde abajo y el
Decano la chance de atesorar una ventaja que alimentaba su esperanza de
mantener la categoría.
Y, cuando la lluvia terminó de encharcar el campo de juego y de
convencer a Gabriel Favale de que no se podía seguir, perdieron los
hinchas, sobre todo los de Racing que habían viajado a seguir a su
equipo.
El juego había arrancado conuna chance clara para la visita, cuando
Gabriel Hauche recibió por derecha y definió afuera. Pero después, a
medida que el agua iba cobrando protagonismo e impidiendo un desarrollo
normal, las cosas se emparejaron de la mano de las imprecisiones.
Hasta que a los 16 Favale cobró un agarrrón en un centro a Juan
Azconzábal en el área y Luis Rodríguez se dispuso a ajusticiar a Jorge
De Olivera. Pero el
arquero se agrandó arrojándose a
su derecha y con las piernas despejó el tiro que ilusionaba a los de
Mario Gómez. Y las cosas seguían como al principio.
Poco después, a los 22, la historia conocida. La cortina de lluvia y la
suspensión acertada para estirar la definición a una jornada futura.
Mientras tanto, Atlético sigue sin ganar y Racing fuera de Promoción.