Agrede a la carcelera con leche materna
Toni Tramel, de Owensboro, Kentucky (EE.UU.) fue detenida el cuatro de marzo acusada de intoxicación pública. No ha trascendido qué hizo exactamente o en qué consistía su diabólico plan para envenenar a la población de Kentucky pero sí sabemos la manera poco habitual que tuvo de vengarse de las autoridades.
Una vez llevada al calabozo se le ordenó a Toni cambiarse de ropa para hacerle las fotos pertinentes para el archivo policial, una carcelera ayudaría a la reclusa a cambiarse. Por comodidad y, por si acaso, Tramel guardaba algún peligroso recurso en la manga.
Y así fue. Cuando Toni se quitó la blusa para ponerse la parte de arriba del “uniforme carcelario” se arrancó el sostén, se llevó las manos a uno de los pechos, apretó decididamente… y roció la cara y el cuello de la carcelera con un chorro de leche materna.
Claro está, la carcelera salió rápidamente de la sala y pidió refuerzos mientras la malvada mujer reía diabólicamente. Y no sólo eso, también se procedió a limpiar a la agredida por si, dados los antecedentes de Toni, la leche estaba contaminada.Afortunadamente el churretón no contenía ninguna clase de veneno o agente biológico que pusiera en peligro a los que le rodeaban.
Toni Tramel, de Owensboro, Kentucky (EE.UU.) fue detenida el cuatro de marzo acusada de intoxicación pública. No ha trascendido qué hizo exactamente o en qué consistía su diabólico plan para envenenar a la población de Kentucky pero sí sabemos la manera poco habitual que tuvo de vengarse de las autoridades.
Una vez llevada al calabozo se le ordenó a Toni cambiarse de ropa para hacerle las fotos pertinentes para el archivo policial, una carcelera ayudaría a la reclusa a cambiarse. Por comodidad y, por si acaso, Tramel guardaba algún peligroso recurso en la manga.
Y así fue. Cuando Toni se quitó la blusa para ponerse la parte de arriba del “uniforme carcelario” se arrancó el sostén, se llevó las manos a uno de los pechos, apretó decididamente… y roció la cara y el cuello de la carcelera con un chorro de leche materna.
Claro está, la carcelera salió rápidamente de la sala y pidió refuerzos mientras la malvada mujer reía diabólicamente. Y no sólo eso, también se procedió a limpiar a la agredida por si, dados los antecedentes de Toni, la leche estaba contaminada.Afortunadamente el churretón no contenía ninguna clase de veneno o agente biológico que pusiera en peligro a los que le rodeaban.