Baile con tracción a sangre
Miranda! presentó su nuevo disco La banda dio el viernes un muy
buen show y mostró los temas de "Es imposible". Menos máquinas y más
rock.
En el Gran Rex, Miranda! cambia de color según la ocasión. Con
puntuales intervalos de dos años entre sí, al uniforme blanco de Sin
restricciones le siguió el vestuario multicolor de El disco de tu
corazón, hasta llegar al riguroso negro del flamante Es imposible. Pero
en la noche del viernes los cambios fueron más lejos de lo habitual.
Después de un arranque a puro tecno-pop con una puesta en escena que
remedaba a Kraftwerk, el grupo integrado por Ale Sergi, Juliana Gattas,
Lolo Fuentes y Nicolás Monoto Grimaldi se dejó llevar por la impronta
guitarrera que se insinúa en su último disco.
Fue al estrenar
Entre mis brazos, quinto en la lista de temas, cuando el volumen
rockero de Miranda! comenzó a subir los decibeles. Para entonces los
nuevos integrantes de la formación, el ex Entre Ríos Gabriel Lucena en
guitarra y Dani Avila en batería, ya estaban a la vista del público. O
sea: desde pre-teens acompañadas por sus padres o abuelas hasta
post-adolescentes en edad de facultad, que potenciaban el efecto
polisémico de sus letras. Como pasaba con los cuadros del pop-art o los
chistes de Olmedo, grandes y chicos compartieron la gracia pero no el
significado de canciones como El Profe.
Aunque en el notable No
lo digas citaron indirectamente a Lunes por la madrugada de Los Abuelos
de La Nada, Miranda! parece estar recorriendo el camino inverso de
Virus: mientras que la discografía de los platenses fue del proto-rock
al pop sintetizado, Ale Sergi y los suyos van de las máquinas a la
tracción a sangre. En un contexto sonoro enriquecido y reinventado,
entonces, el sustrato reggae de Perfecta se recortó con mayor claridad,
Hola ganó en pulsaciones funky e Imán coqueteó con la sinuosidad de una
balada souleada. A la hora de los bises se desató la fiesta con Don. Y
aquello de la guitarra de Lolo se escuchó, por extensión al resto de
sus compañeros, como una síntesis de lo que se acababa de vivir. Más
cerca de la rocktrónica que del electro-pop que pregonaron en sus
comienzos, los Miranda! completaron un muy buen show en la presentación
oficial de Es imposible.«
fuente
Miranda! presentó su nuevo disco La banda dio el viernes un muy
buen show y mostró los temas de "Es imposible". Menos máquinas y más
rock.
En el Gran Rex, Miranda! cambia de color según la ocasión. Con
puntuales intervalos de dos años entre sí, al uniforme blanco de Sin
restricciones le siguió el vestuario multicolor de El disco de tu
corazón, hasta llegar al riguroso negro del flamante Es imposible. Pero
en la noche del viernes los cambios fueron más lejos de lo habitual.
Después de un arranque a puro tecno-pop con una puesta en escena que
remedaba a Kraftwerk, el grupo integrado por Ale Sergi, Juliana Gattas,
Lolo Fuentes y Nicolás Monoto Grimaldi se dejó llevar por la impronta
guitarrera que se insinúa en su último disco.
Fue al estrenar
Entre mis brazos, quinto en la lista de temas, cuando el volumen
rockero de Miranda! comenzó a subir los decibeles. Para entonces los
nuevos integrantes de la formación, el ex Entre Ríos Gabriel Lucena en
guitarra y Dani Avila en batería, ya estaban a la vista del público. O
sea: desde pre-teens acompañadas por sus padres o abuelas hasta
post-adolescentes en edad de facultad, que potenciaban el efecto
polisémico de sus letras. Como pasaba con los cuadros del pop-art o los
chistes de Olmedo, grandes y chicos compartieron la gracia pero no el
significado de canciones como El Profe.
Aunque en el notable No
lo digas citaron indirectamente a Lunes por la madrugada de Los Abuelos
de La Nada, Miranda! parece estar recorriendo el camino inverso de
Virus: mientras que la discografía de los platenses fue del proto-rock
al pop sintetizado, Ale Sergi y los suyos van de las máquinas a la
tracción a sangre. En un contexto sonoro enriquecido y reinventado,
entonces, el sustrato reggae de Perfecta se recortó con mayor claridad,
Hola ganó en pulsaciones funky e Imán coqueteó con la sinuosidad de una
balada souleada. A la hora de los bises se desató la fiesta con Don. Y
aquello de la guitarra de Lolo se escuchó, por extensión al resto de
sus compañeros, como una síntesis de lo que se acababa de vivir. Más
cerca de la rocktrónica que del electro-pop que pregonaron en sus
comienzos, los Miranda! completaron un muy buen show en la presentación
oficial de Es imposible.«
fuente