Lo que no sabias del famoso tono de Nokia
Seguro que todos conocéis el Nokia Tune, si si, el tono que viene por defecto en todos los Nokia, 13 notas que deben ser unas de las más repetidas de la historia, con permiso de los hits musicales de toda la vida. Según parece proviene de una canción española del siglo XIX, el Gran Vals de Francisco Tárrega. Realmente Nokia mantuvo el nombre de la compasión en un principio, “Gran Vals”, pero en 1998 la gente empezó a identificar las notas con los teléfonos de la compañía finlandesa y pronto apareció en los menús de configuración de tonos como “Nokia Tune”. La canción la propuso Anssi Vanjoki, hoy vicepresidente del área multimedia de la compañía, y la razón fue muy sencilla: Gran Vals era la música que se utilizaba en los anuncios de Nokia de la época.
El primer móvil en utilizarla, en el año 1994, fue el Nokia 2110 que como novedad frente a otros modelos de la marca traía casi 30 tonos de llamada diferentes. Y triunfó. La compañía esperaba vender 400.000 unidades del teléfono y acabó vendiendo más de 20 millones. Por suerte o por desgracia, el mundo descubrió que los móviles podían hacer otros sonidos aparte del “ring, ring” y comenzó la fiebre de los tonos.
Seguro que todos conocéis el Nokia Tune, si si, el tono que viene por defecto en todos los Nokia, 13 notas que deben ser unas de las más repetidas de la historia, con permiso de los hits musicales de toda la vida. Según parece proviene de una canción española del siglo XIX, el Gran Vals de Francisco Tárrega. Realmente Nokia mantuvo el nombre de la compasión en un principio, “Gran Vals”, pero en 1998 la gente empezó a identificar las notas con los teléfonos de la compañía finlandesa y pronto apareció en los menús de configuración de tonos como “Nokia Tune”. La canción la propuso Anssi Vanjoki, hoy vicepresidente del área multimedia de la compañía, y la razón fue muy sencilla: Gran Vals era la música que se utilizaba en los anuncios de Nokia de la época.
El primer móvil en utilizarla, en el año 1994, fue el Nokia 2110 que como novedad frente a otros modelos de la marca traía casi 30 tonos de llamada diferentes. Y triunfó. La compañía esperaba vender 400.000 unidades del teléfono y acabó vendiendo más de 20 millones. Por suerte o por desgracia, el mundo descubrió que los móviles podían hacer otros sonidos aparte del “ring, ring” y comenzó la fiebre de los tonos.