Descubren un mecanismo para que los recuerdos duren más
Investigadores argentinos y brasileños demostraron cuál es el mecanismo
cerebral que controla la duración de los recuerdos y cómo es el proceso
para que permanezcan en la memoria.
"El trabajo no apunta a
modificar el contenido de los recuerdos sino a hacerlos más o menos
duraderos, por lo que por medio de mecanismos externos o de otro tipo,
que todavía están en estudio, existe la posibilidad de programar o
manipular su persistencia en la memoria", explicó Jorge Medina, uno de
los científicos que participó de la investigación. El trabajo fue
publicado por la prestigiosa revista "Science".
Medina dijo que la
memoria funciona tanto para los recuerdos traumáticos como para los no
traumáticos, y señaló que la clave de todo es una sustancia llamada
dopamina que activa señales celulares en una región del cerebro que se
conoce como hipocampo. Este sector del cerebro, junto a otras áreas del
sistema nervioso, se encarga de la formación de las memorias en las
primeras horas luego del aprendizaje o de vivir una nueva experiencia.
"Probamos
que si actuamos dentro de las 12 horas posteriores a la vivencia de la
experiencia y activamos el mecanismo que hace que la dopamina actúe
sobre el hipocampo, podemos lograr que un recuerdo dure menos o más
tiempo en la memoria", explicó Medina. La investigación empezó hace
dos años y el jueves fueron publicadas las conclusiones a las que
llegaron los científicos, tras reiteradas pruebas que se desarrollaron
especialmente en Brasil.
Medina comentó: "cuando una persona vive
una experiencia novedosa o repetida y la considera importante, se
libera en forma inconsciente una cantidad mayor de dopamina, que es la
que determina la duración. Si ese mecanismo no se activa, el recuerdo
se pierde".
El investigador destacó que en los ancianos este
proceso de olvido de ciertos recuerdos está acelerado en forma notable,
y añadió que la investigación tiene impacto en la psiquiatría, en la
psicología y en la comprensión de algunas enfermedades como el mal de
Alzheimer.
"Por medio de un fármaco o con algún otro procedimiento
podemos hacer que aquellos recuerdos que nos molestan o perturban no
aparezcan, para lo cual se impedirá que se gatillen determinadas
señales nerviosas y se conseguirá que no se desencadene un trauma",
dijo el médico, especialista en fisiatría y en los mecanismos de
formación de la memoria.
Riesgos
"Como todo
conocimiento científico, también tiene su costado peligroso ya que se
le da la posibilidad a una persona de manipular la duración del
recuerdo de otra. Pero esta investigación está orientada hacia la
mejora del individuo", dijo Medina.
Uno de los aspectos más
relevantes del descubrimiento es que se puede mejorar la condición de
quienes sufren mal de Alzheimer, una enfermedad que hace que la gente
recuerde lo que le pasó hace mucho tiempo pero no lo que le sucedió
hace horas o días.
visto en
Investigadores argentinos y brasileños demostraron cuál es el mecanismo
cerebral que controla la duración de los recuerdos y cómo es el proceso
para que permanezcan en la memoria.
"El trabajo no apunta a
modificar el contenido de los recuerdos sino a hacerlos más o menos
duraderos, por lo que por medio de mecanismos externos o de otro tipo,
que todavía están en estudio, existe la posibilidad de programar o
manipular su persistencia en la memoria", explicó Jorge Medina, uno de
los científicos que participó de la investigación. El trabajo fue
publicado por la prestigiosa revista "Science".
Medina dijo que la
memoria funciona tanto para los recuerdos traumáticos como para los no
traumáticos, y señaló que la clave de todo es una sustancia llamada
dopamina que activa señales celulares en una región del cerebro que se
conoce como hipocampo. Este sector del cerebro, junto a otras áreas del
sistema nervioso, se encarga de la formación de las memorias en las
primeras horas luego del aprendizaje o de vivir una nueva experiencia.
"Probamos
que si actuamos dentro de las 12 horas posteriores a la vivencia de la
experiencia y activamos el mecanismo que hace que la dopamina actúe
sobre el hipocampo, podemos lograr que un recuerdo dure menos o más
tiempo en la memoria", explicó Medina. La investigación empezó hace
dos años y el jueves fueron publicadas las conclusiones a las que
llegaron los científicos, tras reiteradas pruebas que se desarrollaron
especialmente en Brasil.
Medina comentó: "cuando una persona vive
una experiencia novedosa o repetida y la considera importante, se
libera en forma inconsciente una cantidad mayor de dopamina, que es la
que determina la duración. Si ese mecanismo no se activa, el recuerdo
se pierde".
El investigador destacó que en los ancianos este
proceso de olvido de ciertos recuerdos está acelerado en forma notable,
y añadió que la investigación tiene impacto en la psiquiatría, en la
psicología y en la comprensión de algunas enfermedades como el mal de
Alzheimer.
"Por medio de un fármaco o con algún otro procedimiento
podemos hacer que aquellos recuerdos que nos molestan o perturban no
aparezcan, para lo cual se impedirá que se gatillen determinadas
señales nerviosas y se conseguirá que no se desencadene un trauma",
dijo el médico, especialista en fisiatría y en los mecanismos de
formación de la memoria.
Riesgos
"Como todo
conocimiento científico, también tiene su costado peligroso ya que se
le da la posibilidad a una persona de manipular la duración del
recuerdo de otra. Pero esta investigación está orientada hacia la
mejora del individuo", dijo Medina.
Uno de los aspectos más
relevantes del descubrimiento es que se puede mejorar la condición de
quienes sufren mal de Alzheimer, una enfermedad que hace que la gente
recuerde lo que le pasó hace mucho tiempo pero no lo que le sucedió
hace horas o días.
visto en