La fotografía
El origen de
la fotografía está ligado a los fenómenos ópticos y químicos, y surgió
como un avance de la técnica.
El fenómeno
óptico sobre el que se basa la fotografía fue conocido por Arquímedes, y
había sido descripto por Leonardo Da Vinci. Si en una habitación totalmente a
oscuras, se realiza un agujerito por el que pasa la luz, en la pared opuesta se
forma una imagen invertida de la escena exterior.
Gerolamo
Cardamo realizó en el siglo XVI el experimento con una caja con una pared de
vidrio esmerilado en lugar de
la habitación, y observó que la imagen era más nítida si se aumentaba la luz
hacia los objetos. Juan Bautista Della Porta logró mejorar la visualización de
la imagen introduciendo una lente en determinada posición en el agujero de la
caja.. Recién en el siglo XIX se logró descubrir cómo fijar esa imagen que se
reflejaba en la cámara oscura. Después de muchos experimentos, se reemplazó
la pared de vidrio esmerilado por una hoja de papel impregnado en nitrato de
plata, lo que constituyó una especie de primer negativo. Colaboraron en estos
experimentos los descubrimientos sobre la sensibilidad de la luz del nitrato y
el cloruro de plata, que era ya conocida antes de que los científicos
británicos Thomas Wedgwood y Humphry Davy comenzaran sus experimentos, a
finales del siglo XVIII, para obtener imágenes fotográficas; pero estas fotos
no eran permanentes, y al exponerlas a la luz se ennegrecían.
Las primeras
fotografías, llamadas heliografías, fueron hechas en 1827 por el físico
francés Nicéphore Niépce. Unos años después el pintor francés Louis
Jacques Mandé Daguerre realizó fotografías en planchas recubiertas con una
capa sensible a la luz de yoduro de plata: el daguerrotipo. Ambos descubrieron
que, haciendo pasar vapores
de yodo sobre una placa de plata, se produce en esta última una capa de yoduro
de plata que se ennegrece con la luz. Luego eran tratadas con vapores de
mercurio que fijaban las imágenes. Pero se obtenía una imagen única en la
plancha de plata por cada exposición.
En 1861, el
físico británico James Clerk Maxwell logró exitosamente la primera
fotografía en color mediante el procedimiento aditivo de color.
Pero la
fijación de la imagen perdurable y resistente, flexible, liviana, se logró en
1869 con la invención del
celuloide. Hacia fines del siglo XIX fueron fabricadas en escala comercial. La
fotografía constituyó así el arte y la novedad de la burguesía de la época.
El invento de
la película en rollo marcó el final de la era fotográfica primitiva y el
comienzo de una etapa durante la cual aparecieron miles de fotógrafos
aficionados que se interesaron en el nuevo invento.
En la primera
década del siglo XX la fotografía comercial en blanco y negro fue creciendo
rápidamente, y en 1907 se comenzaron a utilizar unas placas de cristal llamadas
Autochromes Lumière en homenaje a sus creadores, los franceses Auguste y Louis
Lumière. En esta época las fotografías en color se tomaban con cámaras de
tres exposiciones.
Después se
comenzó a utilizar en la imprenta para la ilustración de textos y revistas. Y
también llegó la proliferación de este arte, oficio y profesión, pues era
requerido por personajes de la política, la cultura y la vida mundana, que
valoraban en la fotografía la posibilidad de permanecer para la posteridad,
reflejada su imagen lo más cercana a la realidad; y así perpetuarse en el recuerdo de
sus descendientes.
Y
posteriormente, se abrió un nuevo campo comercial, el publicitario.
Alrededor de
1925 se utilizaban polvos finos de magnesio para lograr luz artificial.
Pulverizados sobre un soporte que se prendía con un detonador, producían un
destello de luz brillante y una nube de humo cáustico. A partir de 1930, la
lámpara de flash sustituyó al polvo de magnesio como fuente de luz.
Pocos años
después se popularizó aún más vertiginosamente la fotografía como
profesión, hobby o afición y se generalizó el uso de la película en color, con
la aparición de la Kodachrome en 1935 y de
la Agfacolor en
1936, con las que se conseguían trasparencias o diapositivas en color y en 1941
la película Kodacolor. En 1947, la cámara Polaroid Land, perfeccionada por
Edwin Herbert Land logra obtener fotos reveladas casi instantáneamente. Y a
partir de la década del ' 60 se perfecciona el color, la velocidad, y comenzaron a
utilizarse productos que abarataron su uso (cinc, sulfuro de cadmio y
óxido de titanio) con el empleo de la película Itek RS. Esta técnica logra
los fotopolímeros.
La fotografía
se comienza a convertir en un arte, además de un excelente instrumento de
documentación: es memoria y es visualización; es crónica, es reflejo de
situaciones humanas y en ocasiones es poesía, luz y color, es mensaje expresivo
e interpretativo.
Debido a estos
atributos de la fotografía, se pueden clasificar las producciones en:
comerciales, publicitarias, artísticas, de documentación social, manipuladas o
retocadas, retratos, naturaleza, etc.
También el
gran avance tecnológico del fin de siglo XX alcanzó e hizo evolucionar aún
más esta invención, con la realización de imágenes digitales a partir de
Cámaras Digitalizadoras para Computadoras, sin película y que envían
directamente la fotografía a los ordenadores, a disquetes, a
CD y a Internet, así como
a todas sus
aplicaciones derivadas.fuente
El origen de
la fotografía está ligado a los fenómenos ópticos y químicos, y surgió
como un avance de la técnica.
El fenómeno
óptico sobre el que se basa la fotografía fue conocido por Arquímedes, y
había sido descripto por Leonardo Da Vinci. Si en una habitación totalmente a
oscuras, se realiza un agujerito por el que pasa la luz, en la pared opuesta se
forma una imagen invertida de la escena exterior.
Gerolamo
Cardamo realizó en el siglo XVI el experimento con una caja con una pared de
vidrio esmerilado en lugar de
la habitación, y observó que la imagen era más nítida si se aumentaba la luz
hacia los objetos. Juan Bautista Della Porta logró mejorar la visualización de
la imagen introduciendo una lente en determinada posición en el agujero de la
caja.. Recién en el siglo XIX se logró descubrir cómo fijar esa imagen que se
reflejaba en la cámara oscura. Después de muchos experimentos, se reemplazó
la pared de vidrio esmerilado por una hoja de papel impregnado en nitrato de
plata, lo que constituyó una especie de primer negativo. Colaboraron en estos
experimentos los descubrimientos sobre la sensibilidad de la luz del nitrato y
el cloruro de plata, que era ya conocida antes de que los científicos
británicos Thomas Wedgwood y Humphry Davy comenzaran sus experimentos, a
finales del siglo XVIII, para obtener imágenes fotográficas; pero estas fotos
no eran permanentes, y al exponerlas a la luz se ennegrecían.
Las primeras
fotografías, llamadas heliografías, fueron hechas en 1827 por el físico
francés Nicéphore Niépce. Unos años después el pintor francés Louis
Jacques Mandé Daguerre realizó fotografías en planchas recubiertas con una
capa sensible a la luz de yoduro de plata: el daguerrotipo. Ambos descubrieron
que, haciendo pasar vapores
de yodo sobre una placa de plata, se produce en esta última una capa de yoduro
de plata que se ennegrece con la luz. Luego eran tratadas con vapores de
mercurio que fijaban las imágenes. Pero se obtenía una imagen única en la
plancha de plata por cada exposición.
En 1861, el
físico británico James Clerk Maxwell logró exitosamente la primera
fotografía en color mediante el procedimiento aditivo de color.
Pero la
fijación de la imagen perdurable y resistente, flexible, liviana, se logró en
1869 con la invención del
celuloide. Hacia fines del siglo XIX fueron fabricadas en escala comercial. La
fotografía constituyó así el arte y la novedad de la burguesía de la época.
El invento de
la película en rollo marcó el final de la era fotográfica primitiva y el
comienzo de una etapa durante la cual aparecieron miles de fotógrafos
aficionados que se interesaron en el nuevo invento.
En la primera
década del siglo XX la fotografía comercial en blanco y negro fue creciendo
rápidamente, y en 1907 se comenzaron a utilizar unas placas de cristal llamadas
Autochromes Lumière en homenaje a sus creadores, los franceses Auguste y Louis
Lumière. En esta época las fotografías en color se tomaban con cámaras de
tres exposiciones.
Después se
comenzó a utilizar en la imprenta para la ilustración de textos y revistas. Y
también llegó la proliferación de este arte, oficio y profesión, pues era
requerido por personajes de la política, la cultura y la vida mundana, que
valoraban en la fotografía la posibilidad de permanecer para la posteridad,
reflejada su imagen lo más cercana a la realidad; y así perpetuarse en el recuerdo de
sus descendientes.
Y
posteriormente, se abrió un nuevo campo comercial, el publicitario.
Alrededor de
1925 se utilizaban polvos finos de magnesio para lograr luz artificial.
Pulverizados sobre un soporte que se prendía con un detonador, producían un
destello de luz brillante y una nube de humo cáustico. A partir de 1930, la
lámpara de flash sustituyó al polvo de magnesio como fuente de luz.
Pocos años
después se popularizó aún más vertiginosamente la fotografía como
profesión, hobby o afición y se generalizó el uso de la película en color, con
la aparición de la Kodachrome en 1935 y de
la Agfacolor en
1936, con las que se conseguían trasparencias o diapositivas en color y en 1941
la película Kodacolor. En 1947, la cámara Polaroid Land, perfeccionada por
Edwin Herbert Land logra obtener fotos reveladas casi instantáneamente. Y a
partir de la década del ' 60 se perfecciona el color, la velocidad, y comenzaron a
utilizarse productos que abarataron su uso (cinc, sulfuro de cadmio y
óxido de titanio) con el empleo de la película Itek RS. Esta técnica logra
los fotopolímeros.
La fotografía
se comienza a convertir en un arte, además de un excelente instrumento de
documentación: es memoria y es visualización; es crónica, es reflejo de
situaciones humanas y en ocasiones es poesía, luz y color, es mensaje expresivo
e interpretativo.
Debido a estos
atributos de la fotografía, se pueden clasificar las producciones en:
comerciales, publicitarias, artísticas, de documentación social, manipuladas o
retocadas, retratos, naturaleza, etc.
También el
gran avance tecnológico del fin de siglo XX alcanzó e hizo evolucionar aún
más esta invención, con la realización de imágenes digitales a partir de
Cámaras Digitalizadoras para Computadoras, sin película y que envían
directamente la fotografía a los ordenadores, a disquetes, a
CD y a Internet, así como
a todas sus
aplicaciones derivadas.fuente