El mercurio causa homosexualidad en las aves
Bajos niveles de mercurio en la dieta de los ibisies blancos macho estaría causando que los pájaros se apareen entre ellos en vez de con las hembras, produciendo menores cantidades de polluelos de lo esperado y reduciendo su población.
Esta es la primera vez que un contaminante ha sido encontrado culpable de cambiar la preferencia sexual de un animal ya que muchos químicos pueden reducir la fertilidad o “feminizar” a los machos pero estos continúan prefiriendo a las hembras.
El mercurio es sumamente tóxico, especialmente en la forma de metilmercurio, que reduce la reproducción en aves salvajes al causar problemas en su comportamiento paternal. Para descrubrir si también afectaba el apareameniento, Peter Frederick dela Universidad de Florida en Gainesville y Nilmini Jayasenade la Universidad de Peradeniya, en Sri Lanka capturaron 160 jóvenes ibises blancos de Florida del sur y los alimentaron con comida que contenía metilmercurio para luego monitorear su comportamiento cuidadosamente.
Las aves se dividieron en 4 grupos, el primero del cual no recibió comida con mercurio mientras que los otros 3 recibieron cantidades progresivamente más altas. Se observó que los 3 grupos que consumieron mercurio mostraron más parejas homosexuales que el grupo de control. Mientras mayor era la cantidad de mercurio en la cominda, más aumentaban las parejas homosexuales que llegaban a construir nidos y aparearse con regularidad. Este tipo de apareamientos fueron responsable por el 81 porciento de los nidos improductivos en los grupos que consumiero mercurio.
Ahora los investigadores buscan estudiar otras aves para ver si el fenómeno se repite e intentar prevenir la disminución de los números de reproducciones en especies que ya se encuentran en peligro de extinción.
Esta es la primera vez que un contaminante ha sido encontrado culpable de cambiar la preferencia sexual de un animal ya que muchos químicos pueden reducir la fertilidad o “feminizar” a los machos pero estos continúan prefiriendo a las hembras.
El mercurio es sumamente tóxico, especialmente en la forma de metilmercurio, que reduce la reproducción en aves salvajes al causar problemas en su comportamiento paternal. Para descrubrir si también afectaba el apareameniento, Peter Frederick dela Universidad de Florida en Gainesville y Nilmini Jayasenade la Universidad de Peradeniya, en Sri Lanka capturaron 160 jóvenes ibises blancos de Florida del sur y los alimentaron con comida que contenía metilmercurio para luego monitorear su comportamiento cuidadosamente.
Las aves se dividieron en 4 grupos, el primero del cual no recibió comida con mercurio mientras que los otros 3 recibieron cantidades progresivamente más altas. Se observó que los 3 grupos que consumieron mercurio mostraron más parejas homosexuales que el grupo de control. Mientras mayor era la cantidad de mercurio en la cominda, más aumentaban las parejas homosexuales que llegaban a construir nidos y aparearse con regularidad. Este tipo de apareamientos fueron responsable por el 81 porciento de los nidos improductivos en los grupos que consumiero mercurio.
Ahora los investigadores buscan estudiar otras aves para ver si el fenómeno se repite e intentar prevenir la disminución de los números de reproducciones en especies que ya se encuentran en peligro de extinción.